“El agua es la fuerza motriz de toda la naturaleza”, decía Leonardo da Vinci. En el deporte es crucial. Sea cual sea el deporte que practiquemos es uno de los elementos más importantes a tener en cuenta es la hidratación y no podemos dejarla de lado.
Una óptima hidratación evita una serie de problemas a la hora de practicar ejercicio, entre otros:
- Disminuir el nivel de entrenamiento o juego.
- Fatigarse anticipadamente.
Existen dos tipos de hidratación:
- Hidratación con agua.
- Hidratación con bebidas suplementarias.
La combinación de ambas puede ayudar a mantener el índice de hidratación óptimo, pues son bebidas que aportan sales minerales y electrolitos.
Cómo hidratarse durante el ejercicio del pádel
Nunca debemos esperar a tener sensación de sed. Cuando nuestro cerebro detecta que existe esa sensación comienza el proceso de deshidratación. Debemos, por tanto, beber si hay sed para evitar llevar a nuestro organismo a la deshidratación.
Se puede ver por las pistas a muchos deportistas que sólo beben agua al final de su partido o entrenamiento, o cuando terminan el partido salen de la pista y sólo beben bebidas preparadas.
Os recomendamos evitar ambas cosas. Nuestro consejo para una buena hidratación, que debe combinarse con una buena alimentación, pasa por:
- Beber agua unos dos o tres tragos entre cambio y cambio de lado en los partidos, combinándolo con una bebida isotónica.
- Aprovechar el final de los ejercicios de los entrenamientos para hidratarse, como si se tratara de un partido.
- Evitar atracones de agua durante el entrenamiento o partido.
- Utilizar suplementos isotónicos adecuados, sin abusar.
- Recordad que los preparados isotónicos no deben cargarse de cantidad extra para potenciar su sabor, ya que el objetivo es hidratar.
