En el pádel existen varios tipos de golpes. Las voleas, los remates, las bandejas, los golpes de derecha y los golpes de revés. Pero, también se pueden clasificar en golpes planos y golpes con efecto, aunque estos últimos son un poco más avanzados, pero muy efectivos.
¿Sabes cuál es la mejor manera de realizar golpes con efecto en el pádel? ¿En qué situaciones se recomienda utilizarlos? Entérate de todo a continuación en el Blog de Streetpadel.
Todo lo que debes saber sobre los golpes con efecto en el pádel
Tabla de Contenidos
¿Golpe plano o con efecto?
El primer golpe que se aprende al jugar al pádel es el golpe plano, pues es el más básico y fácil de ejecutar. Con este tipo de golpe, no se busca darle ningún efecto a la pelota ni cambiar su trayectoria, sino simplemente golpear con buena potencia y con la dirección adecuada. En un golpe plano, el contacto con la pelota se efectúa con la pala en una posición completamente plana, es decir, con las caras viendo directamente hacia el otro lado de la pista.
Por su parte, los golpes con efecto se suelen aprender cuando el jugador va adquiriendo un mejor nivel de juego. Los golpes con efecto requieren de una habilidad mayor y un mejor control sobre la pelota. Este tipo de golpes se van a realizar cuando se busca un movimiento particular para la pelota, que pueda cambiar durante su trayectoria y desequilibrar aún más al rival. Para conseguir este efecto, existen dos tipos de golpes con efecto, los cortados y los liftados. A continuación, te decimos las diferencias entre ellos.
¿Cómo y cuándo hacer golpes cortados?
El golpe cortado, también conocido como «slice», es uno de los más populares para buscar más efecto en la pelota. Como su nombre lo dice, la pala «corta» a la pelota. Para ejecutarlo de manera correcta, la cara de la pala que va a impactar a la pelota tiene que estar apuntando ligeramente hacia arriba. Es decir, le entraremos por abajo a la pelota, para que adquiera un efecto giratorio hacia atrás. Si este golpe se hace de manera correcta, entonces la pelota rebotará muy poco después de tocar la superficie, y dificultará la respuesta del rival.
Los golpes cortados suelen utilizarse primero en los saques, para la trayectoria de la pelota y su rebote no sean tan fáciles de predecir. También se recomienda realizar golpes cortados en una volea. Esto hará que la pelota quede más baja y con poco rebote para que el rival pueda contestar. Además, los golpes cortados suelen usarse cuando el jugador quiere recuperar la red, es decir, al hacer una víbora o una bajada de pared.
¿Cómo y cuándo hacer golpes liftados?
Los golpes liftados son considerados los más avanzados para la búsqueda de los efectos en la pelota. Con este tipo de golpes, se busca todo lo contrario que con los golpes cortados, es decir, se busca que la pelota rebote aún más. Además, con este golpe, la pelota adquiere una mayor velocidad después de su impacto con la superficie o con la pared de fondo, y también tiende a caer más rápido por eses efecto giratorio hacia el frente. Este golpe es muy común entre los jugadores de pádel que vienen del tenis, y también es conocido como «top spin».
A diferencia de los golpes cortados, en un golpe liftado, se entra a la pelota por arriba. Es decir, la cara de la pala que entra en contacto con la pelota se debe de encontrar prácticamente viendo hacia abajo. Muchos jugadores describen este golpe como si estuvieran «abrazando» a la pelota.
Este golpe se puede utilizar en varias situaciones de partido. Una de las más frecuentes es al ejecutar un remate de potencia para sacar la pelota por encima de las paredes de la pista. El efecto giratorio de la pelota hace que esta rebote con más fuerza después de tocar la pared de fondo, facilitando su salida de la pista. También se utiliza durante los golpes de fondo, cuando los rivales se encuentran en la red.